Reciclaje

Llevo unos días investigando en internet, acerca de el reciclaje de las capsulas de café. Hay opiniones para todos los gustos. Hay quien dice que van en el contenedor amarillo de envases, hay quien dice que nunca las tires allí, porque los pozos de café son perjudiciales para las maquinas que las tratan, Hay quien dice que las tire a la basura normal, y quien dice que las recogen en puntos de ventas de Nescafé, pero allí no saben nada del tema.

Estoy concienciado de lo importante que es reciclar, pero recuerdo que cuando era pequeño, existía otro tipo de reciclaje, el económico.

 Para la recojida de basura de mi casa en los 70, teníamos un cubo, que era el “tacho” de basura, que muchas veces era una lata de aceite de coche de unos 50 litros, a la que se le quitaba la tapa superior. Alli se tiraba todo, sin bolsa, porque casi no existían. Se dejaba fuera, en la calle, para cuando pasaba el camión de la basura.  Con los años, y para evitar que los perros la desparramaran, se invento un dispositivo, que consistía en un palo metálico vertical con una cesta también metálica a un metro y medio de altura.

Cesta de basura

 Al recogerla, el camión casi no paraba y el que recogía, iba vaciando el cubo dentro del camión y tirándolo a la calle, unos metros más delante de donde lo recogía. Luego salíamos y lo buscábamos. A veces estaba muy lejos, y había que ver donde había quedado tirado. Con los meses, se iba customizando, y teniendo formas originales a bases de golpes que recibía, cuando lo lanzaban del camión, una vez vaciado.

Es verdad, no había nada de reciclaje de basura, pero también se generaban menos residuos. Las bebidas se compraban en envases de cristal retornables. Recuerdo ir a comprar unas Coca-Colas y llevar las botellas vacías. Si no las tenias, había que pagarlas. Si el comercio era de confianza, te las cobraba, pero te devolvía el dinero al retornarlas.  Muchas cosas se compraban a granel. Y las pocas bolsas se reutilizaban. Todos íbamos con la bolsa de la compra. Solo algún supermercado de los grandes daba bolsas, pero a esos se iba poco. Se compraba mucho más en las tiendas del barrio.

Los sifones con soda, se repartían a domicilio. El sodero pasaba cada semana con su camión, y cambiaba los cajones con los sifones vacios, por cajones con sifones llenos.

sifones de soda

Luego pasaba cada semana el “botellero” que era uno que empujaba un carro de madera, y que te compraba todo lo que no te servía, botellas viejas, sifones, ollas, libros, muebles etc. pagando unas monedas, o a veces ni eso. Alguno con más nivel, tenía un caballo que tiraba del carro. Pasaban por la calle gritando a viva voz “boteeeeellero”, para que salgan los vecinos.  Al llegar a Madrid, me encontré con la versión local, que era el chatarrero, pero este ya iba en furgoneta, y con megáfono.

Botellero de Buenos Aires

No existía la obsolescencia programada. Y todo se arreglaba, o se intentaba arreglar. Recuerdo que mi padre intentaba reparar todo lo que se estropeaba, desde una aspiradora hasta una radio. A veces, los arreglos consistían en utilizar piezas adaptadas o inventadas.

Muchas madres, como la mía,  cosían, y adaptaban ropa de hermano a hermano. Los zapatos visitaban al zapatero con más frecuencia que ahora.

Con los años, y en estas partes del mundo, nos convertimos en más consumistas, de usar y tirar. Algunos creían que era progreso, pero al final resultó ser un retroceso que hace que nos carguemos el medio ambiente.

Vamos tomando conciencia y cada vez reciclamos más. Pero yo sigo sin saber qué hacer con mis capsulas de café. Lo mejor será volver al café molido de siempre.

33 comentarios en “Reciclaje”

  1. Si te sirve de algo, hablé con Nescafé sobre el reciclaje de las cápsulas. Las que no guardan residuo después de su uso (como las de café con leche) se pueden tirar al contenedor amarillo. Las que sí guardan residuo (como las de café solo) tienen que ir al punto limpio al contenedor especial de recogida de cápsulas. No lo hay en todos los puntos limpios pero en la web oficial hay un buscador. Con esa recogida selectiva ellos se encargan no sólo de sus cápsulas sino que tienen convenio con otras marcas y supermercados para hacer el reciclaje de todas. Por un lado utilizan el residuo de café para hacer compost y por otro, el plástico lo convierten o en cápsulas nuevas o en nuevos objetos.
    De todos modos sí, lo mejor el volver al café de toda la vida. Pero creo que la información veraz y útil no viene mal cuando hay tanto usuario de cápsulas.

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  2. Donde esté la cafetera italiana de toda la vida, disfrutando del olor del café molido, que se quiten estas cápsulas que tampoco sabemos exactamente lo que contienen. Serán polvos de leche o de café?
    Recuerdo cuando las botellas de cristal de gaseosas se reutilizaban y se llevaban a la bodega donde se rellenaban, por ejemplo, de vino a granel. O las botellas de leche que las teníamos que llevar de nuevo para comprar otras nuevas, como dices tú con las Coca-colas. Sin saberlo, ya hacíamos reciclaje. Gracias por el fantástico relato, un abrazo!!!!

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    1. Es verdad. Soy fan de la cafetera italiana, pero me habian regalado una de estas de capsulas y cai en la tentacion. Volveré a lo tradicional. Jajaja. Muchas gracias por tu comentario. Me anima a seguir buscando recuerdos.
      Un abrazo.

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  3. Nosotros nos negamos a tener cafetera de cápsulas en casa. Tenemos una expres con café molido y si somos muchos la italiana. Como tú dices en este artículo muy interesante es importante reciclar para el mantenimiento del planeta. Saludos y a por un buen café para empezar el día 🙋‍♀️

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  4. A mí también me preocupa el reciclaje.

    Hace tiempo vi una exposición en la que había tres contenedores transparentes: uno tenía la basura que se generaba en la Edad Media, otro la de hace doscientos años y otro la actual. Me impresionó.

    Adoro el café, pero no he comprado una cafetera de cápsulas precisamente por este tema; porque no quiero contribuir a empeorar el medio ambiente. Nosotros no viviremos el desastre, pero nuestros hijos y nietos, sí.

    Gracias por tu comentario en mi blog.

    Besos.

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  5. Vamos por partes, sobre el café, yo soy de café de siempre en cafetera italiana. Tengo una moledora de café y lo suelo comprar en una tienda de esas que traen café de medio mundo. Comprando al peso, no sale mucho más caro. De hecho me intentaron regalar una cafetera de cápsulas pero me negué porque no me termina de gustar. Sobre lo demás, recuerdo la devolución de los cascos de botellas, pues de pequeño todo eran botellas, ni plásticos ni latas. Recuerdo incluso ir a vender al peso el papel de los periódicos que mi padre compraba a diario y con ese poco dinero, comprar algún tebeo usado en una tienda cercana a mi casa. ¡que tiempos! Ahora reciclo todo, de hecho tengo cuatro recipientes para ello, más el punto limpio. Creo que es necesario, aunque a veces sea pesado y laborioso. Espléndido texto que trae espléndidos recuerdos. Un abrazo.

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  6. Pues yo debo ser una mala persona, porque tengo cafetera de cápsulas. También tengo la típica italiana (de las que necesitas bíceps, tríceps y cuádriceps para desenroscarla) pero es más práctico introducir la cápsula y andando. Vacío todas y cada una de ellas. Los posos a las macetas o al cubo de residuos. El aluminio lo guardo para manualidades. Aunque confieso que alguna ha ido al cubo sin contemplaciones. Reciclo todo lo demás, pero me pregunto todos los días donde torcimos el camino, porque antes ya lo hacíamos bien o por lo menos medio bien. La sociedad mal nombrada del bienestar nos ha llevado a la ruina.
    Un beso globo 🎈

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  7. Me has hecho recordar cuando iba a devolver los “cascos” de las coca colas!!! En cuanto al reciclaje me incomoda, porque tengo la cocina llena de cubos diferentes, pero hay que hacerlo. Con las cápsulas en Nespresso sí que las recogen pero también confieso que alguna ha ido directamente a la basura. Un saludo.

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